y el viejo cantó el poema del final
pues los peregrinos aun caminan con la mirada fija en lo marginal
y la muerte aun la muerdes
pues mi institucion me dice que ya estoy sano a pesar de que me gustan los puentes
y las frias aguas del saguan
me lavan este viejo saco
para irte a buscar
mi nobleza se perdio hace años
y mi apellido aun la tengo por si algun dia me sirve de algo
tengo flores marchitas guardadas en el cajon
y el sello del tren
antes de que me atraparan con la sortija que me robe
y tenia quince cuando mire sus ojos
y lo prohibido me hizo llegar y perder mis anteojos
quize escribir y cantarte en tu matrimonio
impedir tanto mi locura con un disfraz de caballero con buena tela
y uno zapatos brillando mi locura por una saludo de ella
y ahora solo me quedan tres frases y mi cartera con centavos pasados
preguntando donde fuiste al salir de mis letras en mi cantar de un sabado
quiero seguir regando este jardin
aunque ya no hay flores y solo yerbas para fuertes dolores
y acordes mal hechos
con sonidos extraños
pasan mi paciencia a la mordaz locura
y el ingenio aun torpeza muy absurda
dejame sentir el palmo
y el olor a cafe en tu cuarto..
un cigarrillo desde tus manos
y los labios rojos como mis deseos mas bajos.
y el centinela de un cuarto
que jamas volo tan alto
pues pienso en creer
y talvez tambien aprender a leer
pues ya no soy exclavo de tu situleza perfecta
ni de tu sonrisa completa
eres mi perdicion en mi simple fonema
y la soñada caricia de una niña muy terca..
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